Todavía estás a tiempo para que no te consuma la cuesta de enero

Enero es el año más difícil a nivel económico para muchos, algo que se ha agravado con la crisis mundial del 2020. Incluso si no pudiste tomar precauciones para asumir todos tus gastos de enero, puedes hacer una estrategia hoy para que no te consuma y así llevar una vida financiera más sana durante los meses venideros.

Haz una lista de prioridades

En este mes llega una gran cantidad de gastos que demandan mucho dinero: impuestos, seguros de todo tipo, recargos de tarjetas utilizadas durante diciembre. Puede que tengas algunos más, pero estos son los más comunes. En ese caso, anótalos también en una lista.

Al lado de cada ítem de la lista, procura colocar el monto que debes pagar y la fecha límite que tienes. Basándote en la proximidad de pago y la cantidad de dinero, reorganiza todo para pagar primero lo que puedes y antes de que llegue la fecha de expiración y se te recarguen intereses por morosidad. Presta especial atención a los creditos rapidos online si los solicitaste.

Evita los gastos innecesarios

Aparte de anotar tus gastos, es importante recortar todos los que no son imprescindibles, como lo podrían ser las salidas al cine e incluso algunos servicios digitales a los que estás suscrito y no usas demasiado. Haz una lista de todos ellos, y siempre ten en mente que ese dinero que deseas gastar tiene que ir a cubrir tus gastos principales.

Este punto requiere de mucha disciplina, además de hablar claramente con la familia. Quizás los niños no lo entiendan mucho, pero es importante que les expliques un poco la situación y hacerles entender que es una medida temporal. Recuerda que no vas a dejar de cubrir las necesidades de tu hogar, sino simplemente dejar de gastar el dinero que no tienes en cosas que no son necesarias.

Lleva una vida acorde a tus ingresos

O incluso menos. Piensa que tu dinero no solo debe servirte para pagar tus cosas al momento, sino que es una herramienta que te va a ayudar a alcanzar tus metas y hacer frente a situaciones inesperadas. Haz un presupuesto realista de cuánto gasta y elimina todo aquello que no te aporta realmente nada de valor.

Para ello, puedes usar lápiz y papel o aplicaciones para móviles. Anota todo aquello en lo que hayas gastado, y pronto te darás cuenta de que tienes egresos que no son beneficiosos en ningún sentido para ti, sino que más bien te alejan de tus objetivos de vida.