Certificados digitales y procesos administrativos online

Hoy en día, las administraciones públicas, desde la Administración General del Estado y sus organismos públicos, hasta las administraciones autonómicas y locales, han establecido pautas reglamentarias específicas en relación con la consecución de tramitaciones y procesos a través de internet para todos los ciudadanos. Esto incluye, claro está, la homologación concreta de los certificados y firmas digitales, que, cada vez más, se convierten en la herramienta imprescindible de cualquier persona que desea resolver asuntos a través de la sede electrónica de consejerías o departamentos ministeriales. El acto de solicitar certificado digital online es ya común y deseable.

A fin de cuentas, no olvidemos cuánto ha influido la pandemia de la COVID-19 en la preferencia de tantísimas personas por realizar acciones y procedimientos burocráticos desde la seguridad del hogar, sin arriesgarse, aun con mascarilla y distancia de seguridad, a acudir presencialmente a otros edificios. Nadie quiere exponerse a la posibilidad, aun remota, de un contagio, y menos aún ahora que la variante ómicron parece extenderse con tanta facilidad. Resulta que obtener firma digital online es una de las mejores vías de protección posible frente al virus al eliminar de la ecuación la asistencia presencial a cualquier edificio administrativo.

Cada administración, en función de sus normas de uso reglamentarias y la legislación vigente, ofrece sus propios procedimientos de firma digital. Pueden ser los certificados más seguros existentes en la actualidad, o modalidades de pasarela electrónica que ofrecen firmas temporales, por así decirlo. En cualquier caso, la obtención de certificado digital de persona física, una vez cumplida la normativa de seguridad e identificación del ciudadano o la ciudadana que lo solicita, es permanente, lo que significa que el acceso a la sede electrónica de los organismos públicos afectados será, a partir de entonces, indefinida.

¿Veremos en un futuro próximo a todas las personas, sin excepción, haciendo uso de certificados y firmas digitales? Aunque todavía es pronto para saberlo, pues el mundo análogo sigue teniendo mucho peso, está claro que, cada año que pasa, son más las personas que se suman a la obtención de esta huella digital que tanto facilita los procesos públicos.