Cómo generar industrias estables y con futuro

Encontrar a profesionales cualificados es importante en cualquier tipo de sector laboral, pero en los modelos industriales es especialmente importante. Los proyectos industriales normalmente acaparan un buen número de recursos técnicos y económicos, y suelen incidir de una manera notable en el desarrollo urbanístico y social. De hecho, se dice a menudo que lo que proporciona una riqueza real tanto a un país como a regiones concretas de ese país es precisamente el desarrollo de una variedad de industrias que sean realmente fuertes y que no se basen fundamentalmente en la estacionalidad, como es el caso del turismo.

El turismo es importante, proporciona ganancias y beneficios al PIB. Pero en nuestro país el turismo ocupa un papel predominante en la economía, y eso siempre es un error. Esa estacionalidad de la que hemos hablado se debe a que la atracción de turistas, fundamentalmente turistas internacionales, está siempre supeditada a una serie de meses, que suelen ser los de verano, o en el caso del turismo rural, los meses invernales. Pero hay otro tipo de industrias que no solo potencian las características geográficas y culturales de cada región, sino que se pueden mantener estables y ofrecer, como en Castilla y León, profesionales realmente entrenados para ello.

Pero para ello también es fundamental potenciar la formación en este sentido. Hay muchos ingenieros industriales de Valladolid que pueden ocuparse de maquinaria específica y de los proveedores de dicha maquinaria, trabajar en la industria textil y láctea, etc. Pero pueden duplicarse las industrias estables, y por lo tanto pueden duplicarse también los ingenieros industriales de Palencia, de Burgos o de Valladolid, por poner solo algunos ejemplos, si se ofrece formación profesional con titulación, homologada y de calidad.

Es importante, pues, y volviendo al principio, que el desarrollo industrial realmente estable que genera riqueza a una comunidad autónoma vaya de la mano de la creación de un cuerpo de trabajadores y trabajadoras realmente especializados en su campo. Se puede conseguir, disponemos de los recursos económicos para ello. Lo único que hay que hacer es saber redirigir y administrar dichos recursos. El resultado será siempre satisfactorio.