Cómo volar en avión a menudo y fácilmente

Algunas personas tienen la enorme suerte de poder viajar en avión muy a menudo por motivos de trabajo o porque visitan cada cierto tiempo a sus familiares.

Suerte porque, aunque es un medio de transporte que asusta a mucha gente, miedo alimentado por las exageradas películas de catástrofe que nos ha regalado Hollywood, lo cierto es que la mejor manera de superar un miedo es afrontarlo.

La sensación que se tiene cuando coger en avión se convierte en un procedimiento rutinario, lejos de ser aburrimiento, es libertad. Nos sentimos viajeros independientes capaces de afrontar cualquier situación y perfectamente preparados para acudir a cualquier lugar del mundo.

Pero, como antes hemos dicho, no todos tenemos la suerte de poder viajar en avión cada año con relativa frecuencia.

Aun así, si queremos cambiar de aires y además superar nuestro miedo a volar, deberíamos planificar aunque sea dos viajes al año que sean baratos. Podemos buscar los mejores precios, ahorrar o solicitar minicréditos rápidos, pues una o dos veces al año no hacen daño. Los novatos en esto de viajar en avión tal vez se sientan muy perdidos a la hora de reservar o comprar un billete de avión.

El mejor consejo posible, al menos si se quiere encontrar comparativas de precios económicos, es utilizar páginas de reservas turísticas genéricas.

Sin embargo, también es importante acudir a las páginas web de las aerolíneas. Las más baratas son, con diferencia, las low cost, que, como su nombre indica, han nacido para ofrecer vuelos baratos a los consumidores con menos recursos, o a aquellos que tengan que viajar con relativa frecuencia.

La mejor idea posible es reservar un vuelo low cost a un sitio cercano, como a la ciudad o la isla de al lado si somos de Baleares y Canarias, y no facturar. Facturar puede salirnos caro en según qué aerolíneas.

Por eso, si nos informamos de las medidas estándar de una maleta de cabina y evitamos cargar con productos prohibidos que han de ser obligatoriamente facturados, ahorraremos tiempo y dinero.

Superar nuestro miedo a volar es fácil, solo debemos emplear con cabeza las herramientas que Internet nos ofrece.