Coworking en Vecindario para empresas recién nacidas

Crear un equipo de trabajo debería ser siempre un objetivo clave en la construcción de cualquier negocio que pretenda tener esperanzas de futuro, y eso en cualquier sector. No obstante, no todos los emprendedores disponen de capital económico suficiente como para disponer, si no de un equipo, por lo menos sí de un espacio de reunión. Algunos sectores, como el marketing o el periodismo, se prestan bien a reuniones virtuales, pero los trabajos más físicos o industriales difícilmente pueden funcionar sin reuniones presenciales, o ciertos tipos de trabajo de oficina.

Porque, al final, el feedback que se genera en la interacción directa presencial es única y a menudo mucho más eficaz que la generada por canales virtuales, ya que las ideas y aportaciones cuajan mejor en un contexto laboral. No así si la reunión se lleva a cabo desde sus casas y en la distancia. De todas formas, alquilar una oficina es siempre una de las mejores opciones posibles para obtener un espacio de reunión sin afrontar los elevados gastos de la obtención de un local. El alquiler de oficinas en Vecindario, de hecho, es hoy en día un recurso presente en esta zona urbana.

El ejemplo que hemos puesto deja claro que esta nueva opción, la del alquiler de oficinas, que todavía es relativamente nueva, es ya una alternativa presente en casi todas las ciudades y núcleos urbanos del mundo. El coworking en Vecindario, sin ir más lejos, puede ser lo que toda nueva empresa del sector turístico necesita para empezar a construir el negocio desde cero. Hablamos de un sector, el del turismo, que en Canarias tiene mucha competencia, de modo que no es sencillo obtener a corto plazo los fondos necesarios para disponer de una oficina propia. Mientras tanto, el alquiler de oficinas en Vecindario puede salvar la vida de muchos y muchas empresarios/as.

Esto no quiere decir que no se puedan hacer reuniones virtuales algunas veces, sobre todo en un ámbito, como el marketing turístico, que se adapta bien a las nuevas tecnologías. Pero no debería ser la norma. Las reuniones físicas dan mucho de sí.