Cultivar nuestras primeras plantas ecológicas

Si tenemos redes sociales como Twitter o Instagram y las usamos con asiduidad, es probable que a menudo nos topemos con fotos preciosas de gente que ha plantado flores y plantas en sus hogares. Margaritas, hortensias, en general plantas perennes o adaptadas al verano y un sinfín de especies muy variadas, todas ellas creciendo sanas y fuertes en sus macetas, en los alféizares de las ventanas o en terrazas sin techo bajo el sol. Y entonces nos preguntamos, motivados por una envidia sana: ¿qué han hecho esas personas para tener unas plantas tan lustrosas? ¿Cómo han aprendido?

En realidad, no hay una sola manera de aprender, ya que hoy en día disponemos de infinidad de fuentes a nuestro alcance. Desde los libros de jardinería que podemos encontrar en librerías y bibliotecas, hasta las propias tiendas de jardinería, que nos pueden informar sobre utensilio y herramientas básicas. Eso es lo que sí se repite en el modus operandi de las personas que plantan y cuidan de al menos una maceta de flores: los recursos básicos. Por ejemplo, el abono orgánico ecológico.

Porque si pensamos que esa bella y colorida flor que acabamos de ver en una fotografía ha crecido tan bien solo por efecto del agua y el sol, estamos muy equivocados. El suelo en el que germina la semilla es igualmente fundamental y no cualquier tipo de tierra sirve. Para empezar, debe ser tierra especializada, llena de nutrientes, y eso es precisamente lo que aportan los fertilizantes ecológicos que podemos adquirir a buen precio en cualquiera de las tiendas de jardinería que hayamos podido descubrir mientras iniciábamos nuestra investigación teórica como principiantes.

Pero incluso el universo de lo abonos es más complejo de lo que parece a simple vista, ya que tampoco vale cualquiera. Por ejemplo, los abonos de cannabis sirven específicamente para el cannabis y probablemente no den tan buenos resultados para cualquier otra especie. En cualquier caso, una vez aprendamos lo básico, comprar nuestros primeros abonos online, además de ser más seguro durante la pandemia, nos impulsará a plantar por fin nuestra primera flor o planta en casa.