Del lado de las energías renovables
Gracias a todas las campañas, educación e información acerca de la mala salud de nuestro planeta, cada vez estamos más concienciados con respecto a lo del cambio climático. Y, todas las catástrofes naturales que se van produciendo lejos de nuestras fronteras, pero también, dentro de nuestros límites, inundaciones, tormentas eléctricas, huracanes, granizo… nos ponen de manifiesto lo que puede pasar en un futuro inmediato y con consecuencias mucho más graves.
Experimentar en tu propia piel como, en cuestión de minutos, un caudal de agua se lleva por delante todo lo que encuentra a su paso y se cuela en nuestro hogar para destrozar todo, sin que nada podamos hacer para evitarlo, nos hace reaccionar. El planeta nos está avisando desde hace mucho tiempo, nos envía señales cada vez más fuertes y con peores consecuencias.
Y, no vale eso de, las grandes empresas multinacionales, las máximas autoridades de los diferentes países del mundo, deberían poner medidas drásticas para atajar las emisiones de gases altamente nocivos para el medio ambiente.
Si los grandes monstruos responsables de la contaminación tienen que poner cartas en el asunto, pero también, cada uno de nosotros. Si cada uno de forma individual se ocupa de clasificar la basura que genera en su casa y tomar las medidas mínimas sobre el uso de aerosoles y demás productos contaminantes, estamos haciendo algo grande por la salud del planeta. Muchos pocos consiguen algo grande. Todos y cada uno de nosotros, debe asumir la parte de responsabilidad que le toca.
Según el informe del Protocolo de Montreal, la capa de la estratosfera ha engrosado en torno al 2-3% cada 10 años. Esta capa es la que nos protege de las radiaciones solares. El esfuerzo trae consigo la recompensa.
Una de las medidas a tomar, para aportar nuestro granito de arena a la conservación y mejora del medio ambiente, es la de apostar por las energías renovables. Puede ser que no tengamos el efectivo necesario para financiar la instalación destinada al aprovechamiento de la energía solar fotovoltaica o, la energía geotérmica que produce energía para la calefacción y agua caliente, por medio de una bomba de calor.
Financiar solicitando unos minicréditos destinados a la compra de equipos que minimicen el consumo eléctrico y aprovechen la energía natural, el sol, el aire… es una solución que beneficia a todos, al planeta y, por supuesto, a nuestra economía. Solicitar préstamos rápidos es tan fácil como rellenar un formulario, enviar documentación y recibir el dinero. Un sencillo gesto como éste, servirá para invertir en energía natural. Invertir, no gastar. Porque realmente es una inversión que nos beneficiara a corto y medio plazo.