El ciclo de una actualización de Google: ¿qué hacer si tu sitio cayó en la clasificación?
Podríamos resumirlo en: introducción de un nuevo algoritmo, modificaciones para mejorarlo, obsolescencia y reemplazo. Las mejoras al algoritmo ocurren poco después del lanzamiento de la actualización, cuando se identifican los problemas relacionados con ella. Esto significa que incluso una Core Update no es definitiva, y aún menos que prevalece a lo largo del tiempo.
Para los dueños de los negocios y los webmasters, esto significa que incluso una caída más o menos grave no es algo permanente. Más bien, habría que tomar una actitud con base en el ciclo de vida del algoritmo para hacer las correcciones pertinentes a tiempo, y tratar de recuperar posiciones de una forma orgánica.
Esperar a que la actualización se estabilice
Todas los cambios en el algoritmo toman su tiempo en efectuarse a nivel mundial. Cada página tiene que volver a ser indexada y clasificada según los nuevos estándares, lo que toma aproximadamente dos semanas para las Core Updates.
Este período de tiempo es sumamente errático y volátil. Los resultados de búsqueda que cambian inmediatamente después de una actualización tienden a revertirse pocos días después, aunque algunos permanecen iguales que al principio y otros simplemente se quedan en la caída o la bajada.
También hay otras actualizaciones que se enfocan más en reformar la manera en la que Google entiende las consultas de búsqueda y/o el contenido de las páginas web. Sin embargo, el buscador ha seguido la misma línea durante las últimas actualizaciones, lo que nos ha servido para mantener una base sobre cómo debería ser un buen sitio web.
Por lo tanto, los cambios en el ranking durante los primeros días no significan realmente nada porque son etéreos. Incluso después de que se comienza a asentar todo, pronto viene el período de ajustes y vuelve a cambiar el posicionamiento en Google. A partir de este momento, sí podemos tener una idea real del nuevo ranking.
Lidiando con la actualización
En este punto, es cuando los expertos en SEO comienzan a auditar las páginas web de las que están encargados. Aquí determinan qué puntos se han mantenido como positivos y cuáles hay que cambiar. También sirve para verificar que se haya construido en una buena base de técnicas apropiadas.
A partir de aquí, se hacen propuestas para mejorar los puntos más débiles. Si bien es difícil determinar cuáles son los cambios pertinentes, el historial de actualizaciones de Google y los registros de esta Core Update de Noviembre sirven como indicios. Luego, se espera un tiempo prudente para que Google vuelva a indexar la página.
Después de esta indexación, se tiene una nueva noción sobre el estado del sitio web. Se evalúan los cambios para determinar si mejoraron el posicionamiento, y cuáles hay que volver a evaluar para hacer nuevas propuestas. Se trata de un ensayo y error constante hasta conseguir que se recupere el ranking.
Todo es bastante experimental en esta etapa, ya que Google no da información clave para entender su nuevo algoritmo. En cambio, los expertos en SEO someten las páginas web a experimentos hasta dar con soluciones y fórmulas más o menos estándares para las demás.
Los estudios son complicados de llevar a cabo porque no podemos ver inmediatamente los resultados de los cambios. La paciencia por parte del cliente es clave, hasta que se encuentra una nueva manera de volver a posicionar. Por ello, el pánico y la toma de acciones erráticas son contraproducentes.
Es quizás en estos períodos posteriores a las Core Updates cuando vemos el precio del posicionamiento SEO reflejado en el trabajo. No se trata de implementar un manual que dice todo lo que hay que hacer, sino de recopilar, estudiar y entender las analíticas para dar soluciones acertadas.