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Ley de Startups: mejoras y ventajas fiscales para los emprendedores en el país
El pasado 10 de diciembre, el Gobierno aprobó la “Ley de Startups”, la cual recopila una serie de medidas que buscan impulsar la presencia de emprendedores y nómadas digitales en el país. El texto ya ha sido validado por el Consejo de Ministros tras varios cambios de última hora, y ya tenemos una buena idea de lo que será validado por el Parlamento.
Un cambio de planteamiento
Antes de conocer más a fondo las medidas que trae la nueva Ley del ecosistema de las empresas emergentes y sus ventajas, cabe destacar que el texto contempla también a los “emprendedores en serie”. En otras palabras, también se incluyen a los que ya han intentado crear una compañía con anterioridad.
Se trata de un cambio radical con respecto al texto original, en el que se exigía que los fundadores no se hubieran beneficiado anteriormente. Ahora, la Ley de Startups permite a los fundadores acogerse hasta tres veces, lo que implica que podrán verse beneficiados emprendedores que hayan creado con éxito otras empresas.
Esto cumple con la solicitud tan imperiosa de un gremio que se expone constantemente al alto riesgo. Son muchos los que empiezan, pocos los que se mantienen el tiempo suficiente para ver resultados, y apenas unos cuantos los que conservan las aspiraciones de crecer.
Por otro lado, se especifica qué se considera una startup: se tendrá que tramitar una certificación gestionada por Ensia y la Oficina Nacional de Emprendimiento. Es la manera en la que se plantea agilizar los trámites para construir una empresa, a través de internet y sin costes notariales. El plazo debería ser entre las 6 horas y los 5 días después de haber completado los requisitos.
Las ventajas fiscales que trae la Ley de Startups
La primera medida fiscal es la reducción del Impuesto de Sociedades y del Impuesto sobre la Renta de No Residentes durante 4 años, desde el 25 al 15%. También se permitirá aplazar el pago de la deuda tributaria sin sumar intereses ni garantías, siempre que se mantenga durante dos ejercicios.
Se introduce un nuevo límite de las stock options, las cuales estarán libres de impuestos hasta los 50.000 euros. Es una progresión significativa desde los apenas 12.500 euros actuales, y un poco superior a los 45.000 euros propuestos en el primer borrador. Su tributación se verá aplazada hasta que se vendan.
Un punto clave serán las deducciones fiscales de hasta el 50% para las inversiones de hasta 100.000 euros. En este punto, incluso los préstamos de dinero podrían significar una opción interesante para los emprendedores que buscan algo más pequeño, sin preocuparse por tener un egreso adicional que no quisieran afrontar.
Una mano amiga para los nómadas digitales
Si la idea es atraer la inversión y el talento extranjeros, es normal que quieran agilizar los trámites necesarios para la obtención de visados. Se crearán nuevos visados para aquellos que quieran entrar en startups españolas y para los autónomos digitales que quieran ejercer desde el país.
En el texto se contempla que los inversores no residentes en España solo van a necesitar un NIF, en lugar del NIE para obtener su visado. Además, se reduce de 10 a 5 años la no residencia previa en España para acceder a este visado especial, como una forma de que retorne el talento nacional y combatir la fuga de cerebros que sufre el país.
Se estima que la nueva Ley de Startups estará lista en verano de 2022, pero que se empezará a aplicar en el último trimestre de este año. Se trata de un período de tiempo prometido ante la UE como parte del Plan de Recuperación.