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Mas móviles y menos comunicación
Nos guste más o nos guste menos, estamos inmersos en la era digital. Cada vez más, va desapareciendo, paulatinamente, el trato directo con personas, cuando llamamos a un operador de telefonía, a una empresa, a un centro de salud y así, con un largo etcétera de empresas de servicios públicos y privados y comercios.
En unos casos, salta un contestador y la voz robótica de una mujer o de un hombre, nos indica que vayamos marcando dígitos de acuerdo a lo que necesitemos: marque el 1 si desea, marque el 2 si lo que desea es…
Y, lo cierto es que, aun en los espacios físicos de empresas y comercios, sobre todo en el caso de las grandes superficies, el trato humano entre quién atiende y el cliente, deja atrás ese tú a tú de antaño, en el que el comerciante no escatimaba tiempo, ni amabilidad, en atendernos. La frialdad y el trato distante, está protagonizando el espacio físico y, por supuesto, el virtual.
La sociedad desarrolla y, dicen las lenguas, que lo que toca es adaptarse al cambio, a la evolución, pero ¿no creen que el precio a pagar es, en ocasiones, demasiado alto?
Y, tal y como titulamos este artículo y, aunque parezca paradójico, a la par que crece la compra de móviles, hay menos comunicación; porque la comunicación no es transmitir por whatsapp que estamos desayunando con amigos en la churrería de una calle de cualquier ciudad, o enviar fotos de una espectacular puesta de sol; comunicarse es mucho más, es algo, que de usarlo cada vez menos, hasta se nos olvida que significa ¿cuál es la esencia de la comunicación entre seres humanos, familia, amigos, compañeros…?
Una vez que nos hemos permitido un espacio para la nostalgia, entraremos de lleno en la actualidad, en el presente, en el movimiento que impera, a todas luces, dejando a oscuras esa sensación que produce la auténtica comunicación entre personas grandes y pequeñas.
Y, cayendo de bruces en la realidad, dejando atrás el momento nostalgia ¿qué móvil comprar? ¿qué cantidad de dinero estaríamos dispuestos a desembolsar que nos garantice la permanencia en el tiempo, no en la operadora, del móvil por el que vamos a apostar?
Los mejores móviles, con una buena capacidad de memoria, óptimos servicios, una batería bastante aceptable y un dispositivo de larga duración, rondarían en el mercado sobre los 500 € en adelante.
Algunos tendrán la suerte de contar con unos ahorrillos, pero, para los que les resulte complicado eso de retirar una pequeña cantidad mensual para afrontar gastos inesperados, comprar un regalo o, como es el caso que nos ocupa, adquirir un móvil, porque el nuestro ya no da más de sí, internet puede ayudarnos en la manera de financiar esa compra, de la forma más económica y sencilla posible.
El mundo frío online también tiene sus ventajas, de tal forma, que podemos acceder a un comparador de préstamos rápidos que nos muestre aquellos créditos online rápidos más adecuados a nuestra situación económica y circunstancias personales. Préstamos rápidos, fáciles de pedir y de concesión urgente; créditos online sin interminables papeleos y tiempos de espera… si aceptan nuestra solicitud, al día siguiente, ya tenemos el dinero para comprar el smartphone que hemos elegido.
Por último y para concluir, disfruten de su adquisición, pero por favor, no se olviden de practicar la comunicación; como seres inmersos en el mundo de la tecnología, no permanezcan anclados en el pasado, pero nunca olviden la esencia principal de todo ser humano, socialización y comunicación piel con piel.