Origen y evolución de las avarcas menorquinas

Las avarcas menorquinas están más de moda que nunca. Este tipo de calzado remonta sus orígenes, como es obvio, a la isla de Menorca; su historia nos lleva a su uso por parte de los honderos que estaban al mando y órdenes del general cartaginés Aníbal en su lucha contra el ejercito romano; pero, más adelante en el tiempo, y debido a sus características, flexibilidad y resistencia, fueron el recurso de los trabajadores del campo.

Desde sus orígenes hasta ahora, las avarcas menorquinas han ido evolucionando; sus diseños originales, la variedad de tonalidades y su material, la piel, las ha convertido en el complemento de moda perfecto para todas las ocasiones. Combinan con un estilo más juvenil y desenfadado, pero también con un vestuario más clásico y elegante. 

La comodidad, ligereza, frescura y el diseño atractivo de unas menorquinas para mujer las hace ideales para lucir en los días de verano. Se trata, nada más y nada menos, que de unas sandalias menorquinas elaboradas a mano, con materiales de primera calidad, un diseño vanguardista y el mimo de las manos de los artesanos de esta bella y espectacular isla del Mediterráneo.

Comprar avarcas de Menorca, únicas, originales, desde sus talleres artesanos hasta tu casa, para que puedas disfrutar del lujo de vestir tus pies con unas sandalias con historia.

Un toque de glamour y belleza en menorquinas para mujer, unas sandalias que combinan con todos los estilos. Menorquinas para niños, resistentes pero delicadas, para las andanzas de los más pequeños. Comodidad y estilo en las menorquinas para hombre. Hay un modelo de menorquina para todos los gustos y géneros. Estilos y diseños diferentes y variados, tantos como preferencias y gustos de aquellos que quieren darse el gusto de vestir sus pies con un complemento único, original y totalmente artesanal.

Hay avarcas repartidas por toda la geografía española, pero solo hay unas que son las auténticas avarcas menorquinas, aquellas que vienen directamente de los talleres artesanos de la isla de Menorca. La diferencia entre unas y otras es clara y evidente.

Descubre el placer de caminar entre algodones con unas avarcas menorquinas; la sensación es muy similar a la de caminar descalzo, porque llevar sandalias menorquinas es comparable a la libertad de un pie desnudo; la flexibilidad y la comodidad y elegancia de los materiales naturales que se usan para la fabricación de unas sandalias menorquinas, las convierten en el calzado perfecto para caminar, sin temor a sentir molestias o cansancio.